La 40ª edición de la carrera más extrema del mundo será al mismo tiempo la 10ª en el continente sudamericano y este año se confirmó el retorno a Perú tras cinco años y las continuidades de Bolivia y Argentina.
De este forma el Dakar vuelve al Océano Pacífico y particularmente a las dunas de Perú, que los pilotos afrontarán después de haber disfrutado durante algunos días de la capital, Lima. La competencia continuará en Bolivia, donde el día de descanso se realizará en la ciudad de La Paz. Finalmente el ingreso a Argentina será por Formosa, pasará por Jujuy, Catamarca y La Rioja para llegar a la provincia de Córdoba y cerrar por primera vez con podio de coronación en la ciudad capital.
El director del Rally Dakar, Etienne Lavigne declaró: “En primer lugar, deseo que todos los aquí presentes pensemos en el pueblo peruano, actualmente víctima de catástrofes naturales sin precedentes”, de esa forma su discurso inició con expresiones de solidaridad Dakar para con el Gobierno del Perú y la población peruana, que enfrenta intensas lluvias y deslizamientos a causa del fenómeno climatológico “El Niño Costero”, que afecta la costa norte del país.
El próximo mes de enero, los nuevos competidores tendrán oportunidad de navegar nuevamente por los cordones de dunas para la primera parte del desafío deportivo. Tras su estadía en Perú, se les propone una nueva variante del tríptico andino, con el descubrimiento de dos facetas del lago Titicaca para celebrar la entrada de la carrera en Bolivia.
La disposición del trazado 2018 permitirá conocer múltiples rostros de los países participantes con el objetivo final de llegada dispuesto en la ciudad de Córdoba que por primera vez albergará el podio de llegada del Dakar.